Buen concierto de William Vivanco en Bellas Artes
Por Joaquín Borges-Triana
William Vivanco es uno de los creadores que dentro de lo que se ha
dado en llamar Canción Cubana Contemporánea sobresale por el conjunto
de su quehacer. No es únicamente que él sea un buen compositor y un
excelente intérprete, sino que además de eso tiene muy claro lo que se
propone con su música. Ello se pudo comprobar una vez más el pasado
jueves 21 de marzo, cuando fue protagonista de un hermoso concierto en
la sala teatro del Museo Nacional de Bellas Artes.
Bajo el título de “Vívelo ahora”, la presentación de casi dos horas de
duración, sirvió para que este trovador procedente de Santiago de Cuba
hiciera un repaso por varios de los temas de su nueva producción
fonográfica, el disco denominado 13 con magia y que todavía no ha
salido al mercado ni está firmado con ninguna empresa discográfica.
Por supuesto que también interpretó canciones de sus anteriores CDs y
una que otra pieza de las grabadas por él como parte del grupo
Interactivo. En tales casos, es lindo ver el modo en que su público
natural y que repletó la salita de Bellas Artes, se suma a cada
interpretación, como parte de una suerte de gran masa coral.
Un recuento de la función permite asegurar que Vivanco sigue apegado a
las raíces de su natal Santiago de Cuba. Fue por aquellos lejanos y
duros años noventa cuando lo conocí, como parte del dúo Wiler, que
integraba con el también cantautor Ernesto Rodríguez, luego miembro de
Postrova. Desde esos días, William ha sido un verdadero estudioso de
la producción musical no solo de la zona oriental cubana sino en
especial de la facturada en el área del Caribe, algo que se percibe en
no pocos de sus composiciones y que le otorga un rasgo singular entre
sus colegas de oficio.
En el disco 13 con magia, la vocación por lo que vendría a ser la
world music vuelve a hacerse presente. Como que he tenido la
posibilidad de escuchar completa la producción fonográfica, puedo
asegurar que este nuevo CD resulta un trabajo de plena madurez,
gracias a cortes como “Palo haitiano”, “Bailarina”, “Ríos que no
vuelven”, “Tu danzón”, “Changüí en París”, “La flor de mi jardín” o
“Verano Mozambique”.
De los cortes del disco 13 con magia que William presentó al público
en su reciente concierto en Bellas Artes, el más aplaudido fue
“Charleston 21”, un corte compuesto e interpretado con Israel Rojas,
de Buena Fe, y que de ser bien promovido por los medios de
comunicación, estoy seguro de que puede llegar a ser muy popular.
En espera de que la nueva propuesta discográfica de William Vivanco
aparezca de forma oficial en el mercado, ya sea en Cuba o el
extranjero, la misma comienza a circular por vías alternativas de mano
en mano y los que estén interesados en escuchar en vivo algunas de
esas canciones y otras de este auténtico santiaguero, les recomiendo
llegarse al espacio que él ha abierto cada dos semanas los domingos a
las seis de la tarde en el Jazz Café, donde se presenta con el
respaldo de su grupo e interpreta algunos de los mejores ejemplos de
lo que está pasando por estos días en la Canción Cubana Contemporánea.
Allí nos vemos.